En Mondonio, en el Piamonte, santo Domingo Savio, que, dulce y jovial desde la infancia, todavía adolescente consumó con paso ligero el camino de la perfección cristiana.
Ver másEn la ciudad de Nam Dinh, en Tonquín, santos Domingo Henares, obispo de la Orden de Predicadores, y Francisco Do Minh Chieu, mártires, el primero de los cuales propagó la fe cristiana durante cuarenta y nueve años, y el segundo trabajó con él como catequista, siendo ambos degollados por su fe en Cristo, en tiempo del emperador Minh Mang.
En San Severino Marche, del Piceno, en Italia, santo Domingo, llamado Loricato, por la coraza de hierro que llevaba ceñida al cuerpo, presbítero de la Orden Camaldulense, el cual, habiendo sido ordenado simoníacamente, se hizo monje eremita y, discípulo de san Pedro Damiani, llevó una vida austera y disciplinada.
Cerca del río Hung Yen, en Tonquín, santo Domingo Mau, presbítero de la Orden de Predicadores y mártir, que en la persecución bajo el emperador Tu Duc, por exhortar a los cristianos a la profesión de la fe llevando el rosario, por su fidelidad a Cristo fue conducido al patíbulo para ser degollado, con las manos juntas, como para subir al altar.
En la ciudad de An-Xá, en Tonquín, santo Domingo Ngon, mártir, padre de familia y labrador. Al exigirle los soldados que pisotease una cruz, se postró y la adoró, profesando así valientemente ante el juez que era cristiano, mereciendo ser degollado de inmediato.
En la ciudad de Nam Dinh, en Tonquín, santos Tomás Dinh Viét Du y Domingo Nguyen Van Xuyên, presbíteros de la Orden de Predicadores y mártires, que por decreto del emperador Minh Mang fueron degollados al mismo tiempo.
En la ciudad de Nam Dinh, en Tonquín, santo Domingo Nicolás Dinh Dat, mártir, que, siendo soldado, le forzaron a renunciar a la fe cristiana, consiguiendo, después de crueles tormentos, que pisase una cruz, pero inmediatamente se arrepintió y, devuelto lo que había recibido por apostatar, escribió al emperador Minh Mang pidiéndole que le juzgasen de nuevo como cristiano que era, a causa de lo cual murió estrangulado.
En la ciudad de Au Thi, en Tonquín, santo Domingo Ninh, mártir, joven agricultor que, por no querer pisotear la cruz, fue degollado en tiempo del emperador Tu Duc.
En la ciudad de Nam Dinh, en Tonquín, de Indochina (hoy Vietnam), santo Domingo Trach, presbítero de la Orden de Predicadores y mártir, decapitado en tiempo del emperador Minh Mang por preferir la muerte a pisotear la cruz.
En el pueblo Xuong Dien, en Tonquín, santo Domingo Tuoc, presbítero de la Orden de Predicadores y mártir en tiempo del emperador Minh Mang.
En Sora, ciudad del Lacio (hoy Italia), santo Domingo, abad, que fundo algunos monasterios en diversas partes de Italia y, con su anhelo de reforma, condujo a otros a una vida regular.
En Cesarea de Palestina, santo Domnino, mártir, joven médico, que en los comienzos de la persecución bajo el emperador Diocleciano, le condenaron a ser enviado a las minas de Fanesia, donde, tras padecer crueles vejaciones, fue entregado al fuego por orden del prefecto Urbano, en el año quinto de la persecución, por haberse mantenido firme en la confesión de la fe.