Conmemoración del santo Job, varón de admirable paciencia en el país de Hus. El Diablo le puso a prueba con permiso de Yavhé cauándole desgracias como enfermedades, muertes de su ganado, pobreza, e incluso la muerte de sus hijos; y todo lo aguantó sin perder la fe.
Celebran hoy: Job.
Ver másLlamado el Padre Damián, padre de los leprosos o el leproso voluntario.
Ver másEn Bourges, en Aquitania, santa Solangia, virgen, de la cual la tradición ha transmitido que sufrió el martirio en defensa de su virginidad (c. s. IX).
En Pontoise, cerca de París, en Francia, san Guillermo, presbítero de origen inglés, que ejerció su ministerio de párroco resplandeciendo por su entrega a las almas y por su fervor religioso.
En la ciudad de Zagreb, en Croacia, beato Ivan Merz, laico, que, dedicado al estudio de las letras y a la enseñanza, dio a los jóvenes el ejemplo de un maestro fiel a Cristo y de un laico creyente entregado al bien de la sociedad.
En Cremona, en Italia, beato Enrique Rebusquini, presbítero de la Orden de Clérigos Regulares Ministros de los Enfermos (Camilos), que sirvió con sencillez a los enfermos en sus dolencias. Intercesor para los depresivos
En Roma, en la vía Latina, san Gordiano, mártir, que fue sepultado en la cripta de una iglesia, donde se veneraban ya las reliquias de san Epímaco (c. 300).
En Mira, de Licia, san Dioscórides, mártir (s. inc.).
En Siena, de la Toscana, beato Nicolás Albergati, obispo de Bolonia, quien ingresó de joven en la Orden Cartujana y, una vez ordenado obispo, prestó un gran servicio a la Iglesia con su celoso servicio pastoral y con su participación en legaciones pontificias.
En Irlanda, san Comgall o Congal, abad, que fundó el célebre monasterio irlandés de Bangor y fue un padre sabio y un guía prudente de numerosos monjes.
En Táranto, en la Apulia, san Cataldo, obispo y peregrino, de origen irlandés, como dice la tradición (c. s. VII).
En Padua, en la región de Venecia, beata Beatriz de Este, virgen, que restauró el monasterio de Gémmola, situado en los montes Euganeos, de Padua, y aunque su vida fue breve, recorrió hasta el final el arduo camino de la santidad monástica.
En Montilla, de la región de Andalucía, en España, san Juan de Ávila, presbítero, el cual recorrió toda la región de la Bética predicando a Cristo y, después de haber sido acusado injustamente de herejía, fue recluido en la cárcel, en la que escribió una parte importante de su doctrina espiritual. Patrón del clero español.
En Florencia, de la Toscana, en Italia, san Antonino, obispo, quien, después de llevar a cabo una labor de reforma en la Orden de Predicadores, se consagró con diligencia al ministerio pastoral de su diócesis, resplandeciendo por su santidad y por su provechosa y sistemática predicación.